Después del resonante éxito de “Peaky Blinders”, finalizada recientemente, su creador -Steven Knight- prepara una nueva serie criminal que se desarrolla en el mundo del boxeo, y que también cuenta con elementos de historia real. Fiel a su estilo, Knight se basa en crónicas y leyendas urbanas del siglo XIX para armar una ficción titulada “A thousand blows” (Mil golpes) que promete ser apasionante.

De acuerdo con hollywoodreporter.com, la serie sigue a dos amigos de Jamaica, Alec y Hezekiah, quienes llegan a East London a finales de los 1800, en plena era post revolución industrial, donde terminan involucrados en el mundo del boxeo ilegal y el crimen. Allí conocen a la líder y a los integrantes de una pandilla criminal femenina de Londres, llamada The Forty Elephants (Los Cuarenta Elefantes).

La serie, además, va a presentar a rivalidad entre los peleadores que buscan convertirse en los mejores, y una serie de intrigas, misterios y traiciones muy al estilo de “Peaky Blinders”.

Por ahora no se sabe cuál será la fecha de estreno, pero se informó que en Latinoamérica se verá por la plataforma Star+ y contará con 12 capítulos.

La serie tiene como protagonista a Stephen Graham, en el papel de un peleador llamado Sugar Goodson, pero por ahora no se ha confirmado más.

Ladronas de Londres

De acuerdo con las crónicas de la época, Forty Elephants fue una brutal pandilla de Londres, controlada por una poderosa mujer llamada Mary Carr, que fue conocida también como The Queen of Thieves (La Reina de los Ladrones). Esta líder delictiva y su pandilla fueron contemporáneos de los Peaky Blinders, aunque su banda estaba formada únicamente por mujeres, que llegaron a ser consideradas las mejores ladronas de Londres.

Las mujeres de la pandilla se vestían con pieles y ropa elegante, esto les permitía entrar a las tiendas de lujo como si fueran dueñas del lugar, y robar todo lo que querían sin ser detectadas.

La “reina” de la pandilla, Mary Carr, usaba distintos nombres para mantener su identidad oculta. Fue ella quien impuso la regla de que todas sus seguidoras debían vestir como mujeres respetables de sociedad, para evitar llamar la atención durante sus atracos. Se dice que sus trajes tenían bolsillos ocultos y que incluso llegaban a usar brazos falsos para cometer sus robos sin hacer escándalos.

Carr se convirtió en una de las mujeres más temidas y peligrosas de la ciudad, y, cuando ella terminó su reinado, fue sucedida por otra mujer conocida como Diamond Annie, que fue la que creó algunas de las técnicas más creativas del grupo de ladronas. Annie solía vestir con abrigos caros y de pieles, hechos a la medida, y se dice que impuso reglas mucho más estrictas para evitar que cualquiera de sus ladronas se saliera de control o intentara robarle su corona y su título de reina de las ladronas.

Annie tenía solo 20 años cuando tomó el puesto, y fue ella quien pensó en dividir su pandilla en distintos grupos para que pudieran atacar más lugares en la ciudad. El apodo de Diamond Annie surgió debido a que ella se ponía anillos de diamantes en todos los dedos, para que sus enemigos sufrieran más lesiones cuando los golpeaba.

La pandilla realizó robos durante décadas, porque tenían técnicas y planes perfectos para evitar ser capturadas. Se dice que era casi imposible arrestarlas y que muy pocas de ellas fueron atrapadas.

Después de Annie, una nueva reina surgió y, supuestamente, a ella se le ocurrió que las ladronas comenzaran a trabajar en casas de familias ricas, para poder cometer sus robos también en ese lugar.